Falda del Carmen, cuna del Tonador II

Para el mes en curso está previsto el primer lanzamiento de prueba del Cohete Tronador II desde Punta Indio, Provincia de Buenos Aires. De consumarse con éxito los seis lanzamientos planificados, Argentina entrará en el exclusivo club de los países con acceso al espacio exterior.

La Herencia del Condor II

Cuando se bajó el triste telón de la Guerra de Malvinas el gobierno militar primero y luego la presidencia alfonsinista decidieron excavar en las montañas  un sueño de muchas naciones: un cohete o vector autopropulsado con capacidad de alcanzar grandes distancias. Las entrañas de la CONAE fueron cuna del mítico proyecto “Condor II”, que alcanzaba los 1200 kilometros, podía llevar cargas de hasta 500 kilogramos (ya sea cargas espaciales u ojivas explosivas) y terminó sus días desmantelado por presión del Departamento de Estado Norteamericano en la era de las “Relaciones carnales” con EEUU. Desarmado fue cargado en un barco y partió a España, para ser destruido por la OTAN. Con el emigraron de la Argentina los miembros del equipo que trabajó en el proyecto, muhcos fueron a parar a la NASA, otros cambiaron de rubro a nivel local.

Más de una década despues, Conrado Varotto, actual Director de la CONAE, negoció, puso en juego su prestigio y convenció a los EEUU de que Argentina  iba a construir un Vector dedicado a fines puramente científicos y de exploración espacial con el Proyecto Tronador I (predecesor del Tronador II). Es por ello que desde el 2007 ha ido creciento el proyecto Tronador, que no alcanza las distancias del Condor II (y evita con ello sanciones para el país por tratados firmados que limitan capacidades de los vectores nacionales), pero permite llegar a órbitas de 500 o 600 kilómetros de altura, ubicando a nuestro país en la carrera espacial.

En junio de este año se transportó desde Falda del Carmen hacia Punta Indio el motor para el cohete y en Agosto se terminó la integración aviónica. El cohete se popularizó a nivel nacional por estar ubicado en la entrada de Tecnópolis.

El proyecto involucró a unas 350 personas, multitud de firmas subcontratistas, y fue diseñado en las entrañas del Centro Espacial Teófilo Tabanera. Será probado finalmente en el transcurso del presente mes (se estipula que antes de fin de año) desde base militar de la Armada y direccionado al oceano Atlántico o al Rio de la Plata.

El lanzamiento buscará probar en vuelo el sistema de navegación, guiado y control por primera vez y de manera vertical. Luego se realizarán otros cinco lanzamientos hasta que en Diciembre de 2015 el Tronador II sea utilizado para transportar un sátelite de la Serie Saocom 1 y 2, luego vendrá el Sac E, también fabricados por la CONAE y el INVAP.

De resultar exitosas estas pruebas Argentina ingresaría al selecto grupo de once países con  vectores para transporte espacial propio, pudiendo alquilar el servicio a vecinos de la región. Baste recordar que el lanzamiento del último satélite, el Sac-D Aquarius, desde un transbordador de la Nasa y con aporte de diversas agencias espaciales (principalmente CONAE y NASA) tuvo un costo de 400 millones de dólares.

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