El cohete Falcon Heavy despegó hoy del Centro Espacial Kennedy de Florida a las 15:45 hora local y como carga lleva, sólo por diversión, un auto convertible rojo de Tesla perteneciente al fundador de Tesla y SpaceX, Elon Musk
Finalmente, la segunda fase del cohete tratará de colocar el auto en una órbita cercana a Marte mientras toca la canción de David Bowie «Space Oddity».
«Calculamos que estará en esa órbita durante varios cientos de millones de años, incluso tal vez más de 1.000 millones de años», dijo Musk a los reporteros.
El multimillonario Musk ha minimizado en repetidas ocasiones las expectativas con respecto a la misión y dijo que bien podría terminar en una explosión.
«Esta es una misión de prueba. Como lo he señalado, hay muchas cosas que pueden salir mal, así que no quiero expectativas de perfección», dijo.
«Lo consideraría un triunfo si simplemente lograra pasar de la plataforma y no la hiciera añicos», dijo.
Pero hasta el momento, todo ha salido como estaba planeado y los dos propulsores laterales del cohete aterrizaron simultáneamente cerca de ocho minutos después del despegue.