El seleccionado británico arribó por última vez a la tercera ronda de una Copa del Mundo en 2006, en la que cayó ante Portugal por penales, del mismo modo que se había despedido ante Alemania en 1990 y contra Argentina en 1998.
Pero esta vez, la suerte cambió desde los doce pasos para Inglaterra gracias al penal que Mateus Uribe estrelló contra el travesaño antes de que Jordan Pickford atajara el derechazo de Carlos Bacca y de que Eric Dier batiera a David Ospina.
El arquero colombiano del Arsenal inglés había desviado el remate de Jordan Herderson que dio una ventaja transitoria a la «cafetera» luego de los penales convertidos por Radamel Falcao García, Juan Cuadrado y Luis Muriel.
A su vez, Harry Kane, Marcus Rashford y Kieran Trippier habían marcado sus remates para Inglaterra, que en cuartos de final se medirá el sábado 7, en Samara, contra Suecia, que en primer turno se impuso por 1-0 a Suiza.
Kane se confirmó como el máximo artillero de Rusia 2018 con seis conquistas al abrir el marcador a los 57′, justamente con un penal sancionado por una falta que sufrió de Carlos Sánchez, que ya había cometido otro la caída 2-1 del debut ante Japón.
Aunque Ospina y Kane se conocen de enfrentarse en la Premier League, el delantero del Tottenham sumó su decimonoveno gol en 27 partidos con Inglaterra al rematar fuerte al medio del arco.
Cuando le queda por lo menos un partido más por jugar en Rusia, Kane ya igualó la marca con la que su compatriota Gary Lineker fue máximo artillero de la edición de México 86.
Inglaterra administró su ventaja aprovechando los nervios y e apuro de Colombia, que llegó al empate en el cierre de los 90′ reglamentarios mediante el zaguero Yerry Mina, que batió a Pickford y a Trippier con un esquinado cabezazo.
Mina también había anotado, de cabeza, otros dos goles en la fase de grupos y se convirtió en el primer defensor en sumar tres conquistas en un Mundial de que el alemán Paul Breitner lo consiguiera en 1974, aunque uno de ellos fue de penal.
El agónico empate incentivó a la «cafetera» del DT argentino José Pekerman a ir por el triunfo que le permitiera avanzar a cuartos de final como hace cuatro años, cuando se despidió justamente ante el anfitrión Brasil.
Carlos Bacca no llegó a empujar un centro rasante de Luis Muriel a los 96′ y ocho minutos después Falcao cabeceó desviado al ser desacomodado por Harry Maguire.
Inglaterra lucía superado en lo físico pero, especialmente, en lo emocional, pues parecía aturdido por el empate de Mina que Pickford había evitado en la jugada previa al «descolgar» del ángulo un derechazo de Uribe.
El empate se ajustó en lo visto en el campo, pues Inglaterra resignó eventuales ofensivas y se dedicó únicamente a detener el juego y a controlar el balón con pases intrascendentes.
Así fue que un error de Kyle Walker a los 81′ permitió la mejor ocasión colombiana hasta el momento, pero Cuadrado remató alto y desviado mientras Falcao y Bacca esperan el centro.
Igualmente Colombia llegó a la paridad que se había advertido durante toda la primera mitad, en la que sólo se destacó un cabezazo de Kane que terminó en el «techo del arco».
Ante la ausencia del lesionado James Rodríguez, Pekerman apostó por la conducción de Juan Fernando Quintero, quien no pudo volver a brillar como en la fase de grupos.
Tras rehabilitarse del empate y resistir los embates colombianos en el inicio del tiempo extra, Inglaterra recuperó la confianza y volvió a pisar el área rival con un zurdazo cruzado y desviado Danny Rose y un cabezazo alto de Eric Dier.
Luego llegaron los penales que sellaron el boleto de Inglaterra, que se sumó en cuartos de final a Francia, Uruguay, Brasil, Bélgica, Suecia, la anfitriona Rusia y Croacia, éstos últimos dos también clasificados desde los doce pasos.
Para Inglaterra sigue con vida la ilusión de conseguir su segundo título luego de su única coronación como local hace 52 años, mientras que para Colombia significó una nueva frustración en su sexta participación en una Copa del Mundo.