Se trata de un ejercicio inadmisible y ningún país democrático va a admitir esa quiebra de soberanía, de los derechos civiles de su población, que se realiza a través de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA) estadounidense, declaró Rousseff en una entrevista ofrecida a una emisora de radio de Belo Horizonte, estado de Minas Gerais.